La Formación Profesional vasca está introduciendo como modelo de aprendizaje en sus ciclos la metodología Ethazi.

Este modelo centra su acción pedagógica en el aprendizaje colaborativo basado en retos, a través del cual el alumnado adquiere las competencias asociadas a cada ciclo superando los proyectos y desafíos que el equipo docente propone.

Son las y los estudiantes, con la guía del profesorado, quienes individual y colectivamente construyen el conocimiento necesario para superar cada reto.

Durante el desarrollo del proyecto, además de los conocimientos técnicos asociados a la rama profesional, se desarrollan las competencias transversales inherentes al desarrollo profesional (trabajo en equipo, compromiso, responsabilidad, adaptación al cambio, toma de decisiones, comunicación, iniciativa, etc).