En el ámbito educativo en la Unión Europea estamos asistiendo a una época donde la promoción de nuevas formas de cooperación entre países se hace más intensa, flexible, basada en la evidencia, adaptada a las necesidades de la comunidad educativa y a las demandas de la sociedad y en interés de toda la ciudadanía y de los proyectos colectivos.
Europa se encuentra en un momento de constante renovación de su unidad y su finalidad como proyecto común, donde fluyen las sinergias entre países, partenariado, formadoras y formadores, y alumnado. Desde Ikaslan Bizkaia afrontamos de modo firme y conjunto los enormes retos que el futuro nos plantea. La Formación Profesional vive también un momento de transformación profunda bajo la demanda de una sociedad cada vez más exigente que afronta desafíos complejos y decisivos.
La participación en proyectos europeos es un motor para consolidar este cambio gracias a la aportación que realizan las personas que participan en el sector educativo y a los beneficios obtenidos de los encuentros compartidos. En Ikaslan Bizkaia creemos que nuestra FP se enriquece del ideal europeo de unidad en la diversidad y de la puesta en práctica con probado éxito de metodologías, proyectos y programas; pero también el modelo europeo se enriquece de la participación de los distintos entes que compartimos geografía, somos diversos y transmitimos nuestros valores para hacer crecer ambos proyectos: en nuestro territorio y el proyecto educativo internacional.
Ikaslan Bizkaia se compromete año tras año con proyectos que persiguen construir una FP más abierta e innovadora: nos posibilita una transferencia a los centros, profesorado y su alumnado. Los proyectos actuales-Ditoga, CreO, Wise, Praline….- en el marco Erasmus +, posibilitan interesantes iniciativas de cambio y crecimiento, pero también de intercambio, movilidad y formación para los y las estudiantes de los centros.
En 2011, el Consejo de la Unión Europea emitió la Recomendación Juventud en movimiento – Promover la movilidad en la formación de los jóvenes que marcaba 10 acciones para impulsar la movilidad en Europa y adoptó unas conclusiones sobre un punto de referencia para la movilidad en formación profesional, que establecían como objetivo que en 2020 el 6% de las personas con estudios de FP tuviese una experiencia de estudios en el extranjero.
El consorcio Ikaslan reconocido nacional e internacionalmente consigue que más de 300 estudiantes de FP realicen una movilidad al extranjero en cada curso académico. Y es que, uno de los principales objetivos estratégicos de nuestra política de educación y formación en la Unión Europea consiste en facilitar al máximo la movilidad del alumnado y profesorado y reducir los posibles obstáculos que podrían dificultarla.
La movilidad en la formación, como confirman distintas investigaciones, tiene un impacto muy positivo sobre el capital humano: permite a los y las estudiantes adquirir nuevos conocimientos y competencias, incrementa su empleabilidad y les hace más proclives a una carrera profesional internacional. Un estudio de la Comisión Europea demuestra que la experiencia formativa en el extranjero favorece la empleabilidad. Constata que las y los jóvenes que han estudiado con una beca Erasmus tienen una tasa de desempleo inferior y que los empresarios y empresarias mayoritariamente valoran la experiencia internacional a la hora de contratar personas.
En resumen, los proyectos europeos consiguen que Ikaslan pueda ampliar redes de colaboración, crecer y hacer crecer la FP de nuestro Territorio a través del contacto con otras realidades. Ikaslan Bizkaia pone a disposición de los Centros para que puedan implementar día a día y mejorar su valor comercial todo lo aprendido y extraído de la cooperación, colaboración y organización en los distintos proyectos sociales.